Todos los factores apuntan que la futura salud de las cuentas de la Seguridad Social, la encargada de gestionar y pagar las pensiones públicas de jubilación, está en grave riesgo. Nunca se han contabilizado unas cifras tan bajas de natalidad como las que estamos padeciendo en la actualidad. Poseemos una tasa de fertilidad de las más bajas del mundo y, por el contrario, somos un referente en longevidad, ya que nuestra esperanza de vida es de 83,1 años. Dichas tendencias apuntan a un desequilibrio demográfico inminente, debido al aumento de la población mayor de 65 años y la disminución del número de trabajadores cotizantes originado por el actual descenso de la natalidad y la escasez de trabajo de calidad. Si a todo ello le sumamos un factor adicional de presión: la jubilación de la generación del “baby boom”, (personas nacidas entre 1946 y 1964), nos encontramos ante una situación muy preocupante en lo referente al porvenir de nuestras pensiones de jubilación. O se financian de otra manera o sufriremos recortes.
Ante este panorama tan poco halagüeño, no es de extrañar que cada vez más españoles sean conscientes de la necesidad de ahorrar de cara al futuro y se pregunten cuáles son los métodos más fiables para asegurarse una jubilación tranquila y sin preocupaciones económicas.
¿Cuál es la mejor forma de ahorro para la jubilación?
Aunque son muchas y diversas las alternativas disponibles para asegurarnos un capital ahorrado para el momento de nuestra jubilación, el seguro en concreto goza de prestigio y buena salud para ello (Planes de Pensiones, PPAs, PIAS, CIALP, SIALP, Mutualidades, planes de ahorro, etc.). Pero antes de decantarnos por una fórmula concreta es recomendable que realicemos un análisis detallado de nuestras necesidades particulares, así como de los deseos y objetivos que nos gustaría cumplir. Para ello es conveniente que nos planteemos las 4 cuestiones siguientes:
- ¿Cuándo y con qué pensión queremos jubilarnos?
- ¿Cuánto podemos y cuánto debemos ahorrar?
- ¿Qué rentabilidad necesitaremos para cumplir los objetivos de ahorro?
- ¿Qué riesgo estamos dispuestos a asumir?
Una vez realizado este ejercicio, seremos más conscientes de que si deseamos disfrutar de una buena jubilación, tranquila y sin preocupaciones económicas deberemos empezar a ahorrar desde hoy mismo. Como antes apuntamos existen una gran variedad de fórmulas de ahorro que nos permitirán cumplir nuestros objetivos cómodamente y sin grandes esfuerzos económicos. Sin duda, la mejor manera para decantarse correctamente por alguno es informarse y conocer sus características, particularidades y diferencias. Estas soluciones, que nos garantizarán tranquilidad y confianza de cara al futuro, se pueden dividir por su funcionamiento en dos grandes modelos de ahorro:
- Los Seguros de Jubilación, también conocidos como planes de jubilación, son pólizas que tienen como objetivo garantizarnos una estabilidad económica en una fecha determinada, enfermedad o fallecimiento. Pueden rescatarse en cualquier momento, siempre que cumplamos las condiciones que hayamos pactado. Fiscalmente no son deducibles, pero al finalizar el plan de jubilación solo tributaremos por los intereses que el plan haya generado. Las aportaciones son libres y flexibles.
- Los Planes de Pensiones, que se caracterizan por ser un instrumento en el que el partícipe va realizando aportaciones periódicas, que podremos rescatar en el momento de jubilarnos, salvo en algunos casos excepcionales en los que se podrían rescatar antes. Dependiendo del tipo de inversiones y el riesgo que estemos dispuesto a asumir, tendremos unos beneficios más o menos abultados, pero siempre teniendo en cuenta que el ahorro invertido en esta fórmula de ahorro es deducible en IRPF, en el momento de presentar la declaración de renta. También es muy flexible en sus aportaciones.
¿Qué pautas debemos seguir para conseguir un buen ahorro de cara a nuestra jubilación?
El ejemplo citado anteriormente, nos permite comprobar que ahorrar para el futuro no es una opción sino una necesidad y que conocemos las fórmulas de ahorro más recomendables. Ahora es el momento de seguir una serie de sencillas reglas que nos asegurarán conseguir una importante acumulación de capital destinado al momento de nuestra jubilación:
- Motivación: Es normal que cuando percibimos lejana la llegada de la jubilación nos resulte complicado llevar a cabo un ahorro. Una forma sencilla de ayudarnos a cumplir nuestros objetivos es visualizar ahora cómo deseamos que sea nuestra vida una vez jubilados y calcular cuánto ahorro necesitaremos para cumplir nuestros deseos.
- Cuanto antes mejor: Una de las claves de cualquier estrategia de ahorro para lograr asegurarnos un buen complemento a la pensión pública de jubilación es la anticipación. Debemos comenzar lo más pronto posible a guardar un porcentaje del sueldo mensual, aunque sea pequeño, ya que lo verdaderamente importante es dar el primer paso y adquirir el hábito y la constancia.
- Regularidad: De poco nos servirá empezar a ahorrar cuanto antes si carecemos de constancia y disciplina. Es más provechoso que aportemos pequeñas cantidades regularmente que cantidades mayores de forma esporádica.
- Cuota: Los expertos recomiendan intentar ahorrar en torno a un 8 por ciento de los ingresos, pero debemos tener en cuenta que cuanto más tarde comencemos, mayor deberá ser la cantidad de dinero destinada para poder asegurarnos una jubilación tranquila.
- Asesoramiento: Si queremos elegir el método de ahorro idóneo, que se adapte a nuestras particularidades, necesidades y objetivos, que posea un buen tratamiento fiscal y nos proporcione una alta rentabilidad, pero sin asumir un riesgo elevado, es necesario que contemos con un asesoramiento de calidad e independiente que ayude a planificar y llevar a cabo las medidas que garanticen alcanzar el objetivo planeado para nuestra jubilación. Sin duda, la mejor opción es contar con la ayuda experta de una correduría de seguros con experiencia que estudie nuestro caso particular y nos ofrezca una fórmula de ahorro para la jubilación a la medida de nuestras necesidades, con todas las garantías profesionales y claridad en los contratos.
Desde la Correduría de Seguro José Silva deseamos que cuentes con el mejor plan posible para tu jubilación, y por ello te ofrecemos las más prestigiosas fórmulas de ahorro: el Seguro de Jubilación y el Plan de Pensiones. Además, nos comprometemos a brindarte una inmejorable atención llevada a cabo por un excelente equipo de profesionales, que resolverá todas tus dudas y te brindarán toda la información que puedas necesitar, así como implicación y ayuda. Contamos además con muy buenos socios, debes saber que nuestra actividad está integrada en el marco colectivo de la Asociación Profesional Cojebro, el Colegio Profesional de Mediadores de Seguros de Madrid y diversos organismos sectoriales, además de acuerdos con las mejores entidades aseguradoras.
Un caso real de nuestra correduría.
Adolfo y Carmen son dos hermanos que tuvieron que emigrar de un pueblo de Galicia. El se fue a Suiza, allí trabajó durante 40 años, ella optó por Madrid donde accedió a la jubilación hace unos meses. Acudieron ambos a nuestra oficina para firmar la solicitud de prestación de Carmen y surgió el tema de las diferencias de su jubilación y el complemento de pensiones de ambos. Adolfo ahorraba mensualmente 700 euros en forma de seguros a largo plazo, ahora disfruta de una pensión de 3.500 mensuales, Carmen prefirió viajar, disfrutar de su familia y apenas podía dedicar 50 euros mensuales, desde el mes de abril percibe 1.300 euros que le impiden tener algunas atenciones con sus nietos. El cuento de la cigarra y la hormiga.
¿Aunque te lo propones constantemente, no eres capaz de empezar ahorrar de cara a tu jubilación?
No te preocupes, nosotros tenemos una solución a tu medida. Cuéntanos tu caso, déjanos a continuación un comentario o escríbenos a nuestra dirección de correo josesilva@josesilva.es. También puedes contactarnos a través de nuestra página web o llamándonos al teléfono 915353009. Estaremos encantados de poder ayudarte.
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