¿QUÉ HACER SI NOTAMOS UN TEMBLOR DE TIERRA?

Este año 2021 ha comenzado con fuerte impacto en la sociedad y sus consecuencias afectan muy directamente al sector asegurador. En los primeros cuarenta días transcurridos hemos gestionado más de 1.000 siniestros y atendido 700 consultas de clientes o personas preocupadas por su vida y patrimonio.

Aunque los investigadores del Instituto Andaluz de Geofísica (IAG) han constatado un descenso progresivo del número de terremotos y de su magnitud, la serie sísmica que desde el pasado sábado 23 de enero se lleva sintiendo en la provincia de Granada ha hecho crecer en gran medida la alarma y la preocupación por los riesgos y peligros que un seísmo, incluso de baja intensidad, puede significar. Afortunadamente nuestro país no representa un área de ocurrencia de grandes terremotos, pero sin embargo sí tiene una actividad sísmica relevante con temblores capaces de generar daños en viviendas, edificios e instalaciones. Por estos motivos, la Dirección General de Protección Civil y Emergencias difunde periódicamente una serie de recomendaciones sobre qué hacer antes, durante y después de un temblor para mantener informada y preparada a la población:

• De manera preventiva, podemos adoptar una serie de medidas que ayuden a minimizar los riesgos de un temblor, como por ejemplo anclar los muebles y no colocar en zonas altas objetos pesados. También es conveniente tener preparado un botiquín de emergencia, conocer las zonas seguras o salidas de emergencia de nuestra casa, colegio o lugar de trabajo y los teléfonos de emergencia de ambulancia, policía y bomberos. Y, por supuesto, contar con un buen seguro multirriesgo para tu hogar, tu negocio y tu Comunidad de Propietarios.

• Durante un terremoto, en la medida de lo posible debemos mantener la calma, alejarnos de muebles, ventanas, cristaleras, vitrinas, tabiques y objetos que pueden caerse y llegar a golpearnos y resguardarnos debajo de asientos o mesas y protegernos la cabeza con los brazos. Si la sacudida nos sorprende en el exterior es conveniente alejarnos de edificios, muros y postes y si estamos conduciendo es aconsejable permanecer dentro del vehículo, así como tener la precaución de alejarse de puentes, postes eléctricos, edificios degradados o zonas de desprendimientos.

• Una vez finalizado el temblor, no debemos utilizar el ascensor, ya que los efectos del terremoto podrían provocar su desplome o dejarnos atrapados en su interior. Para alumbrarnos debemos utilizar linternas y evitar el uso de velas, cerillas o cualquier tipo de llama durante o inmediatamente después del temblor, que puedan provocar una explosión o incendio. Es muy importante, siempre que sea posible, cerrar las llaves de agua, luz y gas para evitar fugas y otros incidentes relacionados como incendios o explosiones. Deberemos estar alerta ante posibles réplicas, no utilizar el teléfono a menos que sea necesario y hacer caso únicamente a las informaciones de organismos y autoridades oficiales.

¿Cuáles son las zonas de España con más peligro sísmico?

Nuestro país está situado en una zona de actividad sísmica moderada, pero aún así se producen miles terremotos al año, aunque son menos del 10% los que llegamos a sentir. Se trata de una actividad natural y es deseable que así suceda, ya que de este modo se evita que se acumule la energía y desemboque en un seísmo de gran magnitud.

El mapa del Instituto Geográfico Nacional indica que las zonas de mayor peligrosidad sísmica en nuestro país son las regiones más próximas al límite entre las placas tectónicas euroasiática y africana, donde se producen los seísmos destructivos.

Las Cordilleras Béticas son la franja donde se producen más terremotos y de mayor magnitud. Esta zona incluye el sur de Andalucía, Murcia y el sur de la Comunidad Valenciana. Por lo tanto, las provincias de Málaga, Granada, Almería, Huelva, Cádiz, Murcia y Alicante son los principales focos de peligro de seísmos en España. La Cordillera Pirenaica es la segunda zona de la Península Ibérica con más seísmos, debido a la colisión de dos placas tectónicas: la ibérica y la europea. Por último, la mayor parte del contorno mediterráneo y distintos territorios de Galicia tienen riesgo de sufrir terremotos, pero al no haber grandes fallas no existe el riesgo de que los seísmos sean destructivos en estas zonas.

¿Quién se hace cargo de los daños producidos por un terremoto?

Si nuestro hogar, Comunidad de Propietarios o negocio ha sufrido daños por los efectos de un seísmo, podremos solicitar el pago de las correspondientes prestaciones siempre y cuando tengamos contratada una póliza que cubra la propiedad dañada y estemos al corriente de su pago. No obstante, no será la compañía aseguradora la que en última instancia se hará cargo de la indemnización. Los terremotos están cubiertos por el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), un organismo dependiente del Ministerio de Economía, que se ocupará de los riesgos extraordinarios siempre que exista un seguro privado que ofrezca cobertura.

La existencia del Consorcio no solo descarga a las compañías de tener que afrontar elevadas indemnizaciones por eventos imprevistos de gran magnitud, sino que también ofrece a los ciudadanos y empresas una solución aseguradora para este tipo de episodios. En caso contrario, las primas de seguro en zonas de riesgo serían muy elevadas o este riesgo estaría excluido de las coberturas y la falta de aseguramiento dejaría a muchas personas desprotegidas. Por lo tanto, esta entidad pública complementa los servicios del sector asegurador y actúa con carácter subsidiario para dar cobertura a los asegurados en casos de riesgos extraordinarios no cubiertos por las compañías. 

De manera habitual, las pólizas de seguros destacan en sus condiciones generales cuáles son los riesgos extraordinarios cubiertos por el Consorcio, que en caso de los terremotos se englobarían en fenómenos de la naturaleza, junto a inundaciones extraordinarias, maremotos, erupciones volcánicas, tempestad ciclónica atípica, tornados y los vientos extraordinarios (rachas superiores a los 120 Km/h) y caídas de cuerpos siderales y aerolitos.

¿Cuál es la mejor forma de reclamar las indemnizaciones?

Sin duda, la mejor opción es contar con un asesoramiento profesional, imparcial e independiente como es el que nos ofrece un corredor de seguros. Él se hará cargo de orientarnos en los tramites que debemos realizar para cobrar la correspondiente indemnización, de la documentación que debemos aportar, nos representará ante la compañía aseguradora, e incluso se ocupará de supervisar la gestión entre la compañía y el CCS.

José Silva Correduría de Seguros es la mejor opción, ya que somos expertos en la comparativa de seguros para hogar, negocios y Comunidades de Propietarios. Estudiaremos las necesidades específicas de cada cliente para poder ofrecerle una póliza personalizada, con todas las garantías profesionales y claridad en los contratos. Además, garantizamos un amplio servicio postventa realizado por un excelente equipo de profesionales que brindará ayuda en caso de sufrir un siniestro. Disponemos de un amplio catálogo de seguros que cuentan con todas las garantías, ya que nuestra actividad está supervisada por la Dirección General de Seguros e integrada en el marco colectivo de la Asociación Profesional COJEBRO, el Colegio Profesional de Mediadores de Seguros de Madrid y el organismo internacional BIPAR, entidades que velan por los intereses de los consumidores de seguros.

¿Los temblores han causado desperfectos en tu vivienda, edificio o negocio?, comparte con nosotros tu experiencia.

Cuéntanos tu caso dejándonos a continuación un comentario, podemos ayudarte a resolver cualquier siniestro. Si necesitas más información puedes contactarnos a través de nuestra página web, de nuestra dirección de correo josesilva@josesilva.es o llamándonos al teléfono 915353009. Recibirás una inmejorable atención, estamos para ayudarte.

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