Contar con un seguro de salud no solo representa una inversión en tranquilidad y seguridad para ti y tu familia, sino que también proporciona agilidad, libertad de elección y acceso a magníficos profesionales médicos. Con una póliza de salud, tienes a tu disposición una red de centros hospitalarios y la posibilidad de recibir atención médica inmediata, sin largas listas de espera. No obstante, aunque los seguros de salud complementan y perfeccionan las ventajas del sistema público de salud, muchas personas se ven influenciadas por una serie de ideas erróneas que han ido tomando fuerza con el tiempo. A menudo, estos falsos mitos sobre los seguros de salud generan confusión y llevan a algunos a desestimar la opción de contratar una póliza, perdiendo la oportunidad de acceso al espectacular mundo de la medicina privada.
Es fundamental erradicar el pensamiento de que un seguro de salud reemplaza las garantías de la Seguridad Social. Debemos entender que las completa, ofreciendo una alternativa y acceso más ágil y personalizado. A continuación, desmentiremos algunos mitos comunes sobre los seguros de salud, para ayudarte a comprender la realidad de sus beneficios.
¿Qué es un seguro de salud?
Un seguro de salud o seguro médico es una herramienta que cubre, en parte o en su totalidad, los gastos relacionados con la asistencia médica, permitiéndonos acceder a una extensa variedad de servicios sanitarios con total flexibilidad y un trato personalizado de calidad. A través de una póliza de salud, los usuarios pueden acceder a la medicina preventiva, consultas rápidas con especialistas y pruebas, hasta hospitalización en habitación individual, tratamientos específicos e intervenciones quirúrgicas. Todo respaldado por un completo cuadro de profesionales y el uso de técnicas avanzadas.
Entre las ventajas de los seguros de salud sobresale la posibilidad de personalización, lo que permite ajustar sus prestaciones en función del presupuesto. Así, quienes buscan un seguro de salud pueden priorizar y elegir entre diversas opciones.
Además, es importante destacar que contar con un seguro de salud privado no limita el acceso a la sanidad pública. Por tanto, si en algún momento el usuario prefiere ser atendido en un centro sanitario público, tiene la seguridad de poder hacerlo. De hecho, es muy recomendable contratar un seguro de salud como complemento a la sanidad pública, para obtener tiempos de espera más cortos y acceso a servicios adicionales que pueden ser útiles en situaciones específicas. Esta versatilidad es especialmente atractiva para los trabajadores autónomos, empresas y empleados por cuenta ajena que pueden beneficiarse de ciertas ventajas fiscales.
Sin embargo, para aprovechar al máximo todos sus beneficios, es trascendental contar con la póliza adecuada. Ante la actual diversidad de opciones en el mercado, elegir el seguro de salud conveniente puede ser una tarea desafiante, por lo que resulta muy recomendable disponer del asesoramiento profesional de una correduría de seguros.
Desmontando falsos mitos sobre los seguros de salud:
1. «Los seguros de salud solo sirven para dolencias leves»
Falso. En realidad, la mayoría de las pólizas de salud ofrecen una cobertura completa, que incluye desde consultas generales hasta tratamientos especializados, hospitalización e intervenciones quirúrgicas. No obstante, es cierto que algunas pólizas excluyen las enfermedades preexistentes o aplican ciertas condiciones en caso de que el asegurado padezca una enfermedad grave en el momento de su contratación. Pero actualmente, algunas aseguradoras han desarrollado productos específicos para colectivos o personas que presentan problemas de salud, ofreciendo así alternativas para diferentes situaciones.
2. «En los seguros de salud siempre hay pagos adicionales»
Otro mito frecuente. La realidad es que existen pólizas con y sin copago. El copago en los seguros de salud son pequeñas cantidades adicionales que el asegurado abona cuando utiliza determinados servicios médicos, lo cual ayuda a reducir el precio inicial de su póliza. Consultar con un corredor de seguros ayuda a encontrar la opción más adecuada para que cada persona física o jurídica ajuste el contrato a sus necesidades.
3. «Los mejores médicos están en la sanidad pública»
Una afirmación tan rotunda no es cierta. En España, tanto la sanidad pública como la privada cuentan con profesionales de un grandísimo nivel. Además, algunos hospitales privados son también centros universitarios de formación, lo que garantiza una calidad profesional equiparable en ambos ámbitos.
4. «Con los seguros de salud no puedo elegir el médico que quiero»
No es verdad. Las aseguradoras cuentan con cuadros médicos amplios, que permiten acceder a una gran red de profesionales en diferentes especialidades. Pero, además, existen pólizas que ofrecen reembolsar parte de los gastos si decides acudir a un profesional fuera del cuadro médico. Esto proporciona flexibilidad y libre acceso a la asistencia médica que más se adapte a cada urgencia, sin tener que asumir gastos elevados.
5. «Los seguros privados ponen en peligro la sanidad pública»
Totalmente falso. La coexistencia de los sistemas de sanidad pública y privada permite que ambos modelos se complementen, siempre que las distintas comunidades autónomas no reduzcan su inversión en el sistema público. En 2023, en su conjunto ese gasto representó más del 46% del producto interior bruto de España, según datos del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social. Teniendo en cuenta factores como el envejecimiento de la población y la alta incidencia de enfermedades crónicas como la diabetes o la hipertensión, la sanidad privada alivia la presión sanitaria y disminuye las listas de espera, sin reemplazar ni poner en riesgo el sistema público.
6. «Tener un seguro de salud es muy caro»
Este es uno de los mitos más extendidos, pero, en general, no es cierto. Hoy en día, existen opciones de seguros de salud asequibles y adaptados a cualquier perfil de edad y riesgo. De hecho, una póliza básica con coberturas de medicina general, hospitalaria y pediatría puede rondar lo equivalente a un poco más de un euro al día para un amplio grupo de personas. Además, existe la posibilidad de acordar precios minorados a familias y pólizas colectivas para empleados.
7. «Ahora soy joven y estoy bien de salud, no necesito un seguro privado»
Eres una persona afortunada, pero quizá olvides que la edad y el estado de salud influye en el precio del seguro. Te será más fácil será acceder a una póliza con precios asequibles cuando estás bien. La enfermedad y el accidente pueden surgir sin previo aviso, y cualquier condición diagnosticada después podría considerarse preexistente al contratar un seguro más adelante. Esto podría derivar en primas más altas o en dificultades para encontrar una compañía de seguros que incluya ciertos tratamientos.
En la Correduría de Seguros José Silva hacemos fácil lo complejo. Si estás planeando contratar un seguro de salud y disponer del mejor servicio post venta, ponte en contacto con nosotros.
© José Silva Correduría de Seguros 2024.